Préstamos Hipotecarios – Consejos Para Compradores de Vivienda

La mayoría de los canadienses tienen algún tipo de deuda. No todas las deudas son malas; por ejemplo, sacar una hipoteca para comprar una casa puede ser una buena inversión. Pedir un préstamo productivo te ayudará a mantener tu presupuesto en equilibrio. Aquí hay algunas cosas a tener en cuenta.

La busqueda de una hipoteca

Comparar precios es clave a la hora de obtener un nuevo producto crediticio, como una hipoteca. Diferentes prestamistas tendrán diferentes tasas de interés y condiciones. Tómete tu tiempo para comparar las diferentes opciones disponibles, como las tasas de interés fijas y variables, y las hipotecas abiertas y cerradas. Además, habla con varios prestamistas para asegurarte de obtener el mejor producto hipotecario para tus necesidades.

Pruebe la Herramienta Calificadora de Hipotecas de la Agencia de Consumidores Financieros de Canadá para ayudarlo a determinar si puede o no calificar para una hipoteca en función de sus ingresos y gastos. La herramienta ofrece información imparcial y confiable. También ofrecemos varias calculadoras diferentes para ayudarlo en cada etapa de su viaje de compra de vivienda.

Si ya tienes una hipoteca y estás teniendo problemas para hacer tus pagos, no dudes en contactar a tu asesor financiero para evaluar las diferentes opciones disponibles para ayudarte.

Piensa detenidamente antes de obtener un HELOC

Una línea de crédito con garantía hipotecaria, comúnmente denominada HELOC (home equity line of credit), es una forma de crédito que se basa en el uso de tu vivienda como garantía de que devolverás el dinero que pediste prestado al banco. A diferencia de un préstamo, una línea de crédito HELOC te permite pedir dinero prestado, devolverlo y volver a pedirlo prestado hasta un límite de crédito máximo.

Puede parecer que usar el capital de tu casa es una forma rápida y fácil de pagar gastos más grandes. Si bien puedes beneficiarte a corto plazo, también es importante considerar los riesgos a largo plazo. Grandes cantidades de crédito disponible pueden hacer que sea más fácil gastar en exceso y tener más deudas durante mucho más tiempo. También es posible que debas pagar tu HELOC en su totalidad si deseas cambiar de prestamista al renovar tu hipoteca.

Si decides que una línea de crédito HELOC es adecuada para ti, asegúrate de comprender todos los términos y condiciones de su producto antes de poner tu firma. Tómate el tiempo necesario para revisar y comparar tus opciones y pide a los posibles prestamistas que aclaren cualquier cosa que no entiendas.

Hazte estas preguntas

Considera lo siguiente antes de pedir prestado:

¿Necesitas el dinero ahora o el gasto podría esperar hasta que hayas ahorrado?

¿Los pagos mensuales se ajustan a tu presupuesto?

¿Seguirás siendo capaz de afrontar los pagos si cambian las tasas de interés?

¿Qué pasa si te saltas un pago?

Puedes encontrar más consejos prácticos y herramientas para ayudarte a pedir prestado de manera inteligente contactando a Ron Cabezas ahora mismo.